Por no suspender su actividad y ajustarse velozmente a los protocolos de seguridad para sostener el trabajo.
«Como dijo Darwin: “Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio”, y creo que en Scati hemos sabido adaptarnos». Así explica Alfonso Mata, director general de la empresa de seguridad aragonesa Scati, la fórmula de esta compañía para mantenerse a flote en los meses más duros de la pandemia. Por eso, «este premio es un reconocimiento al trabajo bien realizado al implementar todas las medidas de seguridad necesarias para prevenir el contagio de la enfermedad, pero sobre todo afianza nuestra capacidad de adaptación a cualquier situación por adversa que sea», señala Mata sobre el galardón que HERALDO les ha concedido con motivo de la celebración de los Premios Empresariales Covid-19.
«La industria de la seguridad ha sido considerada esencial, por lo que en Scati hemos continuado con nuestra actividad habitual en todo momento, tanto en nuestra sede central en Zaragoza como en nuestras filiales de México y Brasil», explica el director general. Aun así, «para ayudar a frenar la transmisión del virus, facilitamos que todas aquellas personas que pudieran desempeñar su trabajo desde casa lo hicieran –indica Mata–. Scati es una empresa tecnológica e internacional por lo que ya estábamos preparados para afrontar la transformación digital y la instauración del teletrabajo no ha supuesto ningún inconveniente».
«Como especialistas en imagen, desde que empezó la pandemia vimos como las cámaras y en particular el análisis del vídeo iban a permitir multitud de aplicaciones para convivir mejor con la nueva situación y prevenir el contagio: reconocimiento facial para control de accesos sin contacto, control de aforo mediante cámaras de conteo de personas, medición de temperatura corporal mediante tecnología termográfica o detectar que llevas puesta la mascarilla…». «Estas son las aplicaciones que hemos incorporado estos meses y algunas seguramente han venido para quedarse», afirma Mata, quien, además, añade que «de le la crisis surge también la oportunidad».
«Todas estas tecnologías nuevas nos las hemos aplicado a nosotros mismos. Nuestras oficinas no pueden estar más controladas y, para las personas que venimos aquí, la sensación de seguridad no puede ser mayor. También nuestros clientes se están aprovechando de estas soluciones en edificios corporativos, oficinas, transporte, etc», indica el director general de Scati sobre la actividad de su empresa que, desde Zaragoza, exporta esta tecnología a más de 20 países en América Latina, Europa y Oriente Medio.
Sobre su labor, Mata apunta:«En Scati desarrollamos soluciones de videovigilancia inteligente. Empezando por las cámaras, que son los elementos más visibles, pero poniendo especial foco en su ‘software’ de explotación, que son herramientas que necesita una gran organización para gestionar los vídeos, con fines de seguridad y, cada vez más, como un formidable apoyo a la operativa de muy variados negocios».