Ante el espectacular ritmo de crecimiento que vive el comercio electrónico, con incrementos del 20% anual, el sector logístico se enfrenta a un proceso de transformación digital sin precedentes donde la conectividad, la inmediatez y la imagen reputacional son clave para ser competitivos.
El concepto de Industria 4.0 implica la integración técnica de los sistemas ciberfísicos y el uso de Internet en los procesos industriales hasta conseguir “fábricas inteligentes” gracias a la automatización y la digitalización de la cadena de suministro.
Con millones de envíos diarios, almacenamientos, vehículos, productos y personas implicados, la industria 4.0 requiere de un cambio en la logística, por lo que no se entiende la transformación de una sin la evolución de la otra.
Sin embargo, la logística es un sector muy maduro con márgenes bajos cuya única inversión en tecnología está ligada a la reducción de costes.
Pero, ¿Qué ocurre por ejemplo si se pierde una mercancía y perdemos la confianza de grandes clientes?
El siguiente artículo tiene como objetivo explicar cómo gracias a las nuevas tecnologías y, concretamente la incorporación de Inteligencia Artificial en los sistemas de vídeo, hace posible que tanto empresas industriales como logísticas superen los retos que plantea la IV Revolución Industrial.
Por ende, invertir en sistemas de videovigilancia permite que el Departamento de Seguridad se convierta en un proveedor interno de herramientas de optimización del negocio para mejorar la imagen de marca, mejorar la experiencia del usuario, la excelencia empresarial y en definitiva, para maximizar los resultados.
Soluciones integrales de seguridad
Como premisa fundamental, los sistemas de videovigilancia deben garantizar la seguridad integral de la cadena de suministro incluso en picos de producción fuertes donde la incorporación de personal temporal se dispara. Por ello es necesario contar con una solución que garantice la seguridad tanto de instalaciones como mercancías y que sea capaz de supervisar los procesos para que la calidad de la producción no se vea afectada.
Gracias a la Inteligencia Artificial y al Big Data, los sistemas de videovigilancia son una pieza clave para superar cualquier desafío de esta nueva era.
Más allá de la seguridad, los sistemas de CCTV se están convirtiendo en la herramienta esencial para supervisar procesos industriales y/o logísticos, asignar mejor los recursos, garantizar la trazabilidad de los envíos, gestionar y optimizar stocks y en la base para la toma de decisiones de cualquier departamento de la empresa.
Supervisión de procesos productivos y/o logísticos a través del vídeo
La integración de los sistemas de vídeo con cualquier sistema de gestión (ERP, SGA, etc.), garantiza la trazabilidad total de las mercancías y la resolución total de incidencias con un coste de gestión mínimo desde el momento en el que se implementa el sistema.
Junto a la captura de imágenes, los sistemas de CCTV recogen y almacenan información asociada a cada mercancía (Nº tracking, origen, destino, dimensiones) junto con los instantes de grabación visual de la mercancía.
El acceso rápido y directo al vídeo grabado asociado a cada mercancía permite resolver cualquier incidencia en tiempo real bien a través de la búsqueda de metadatos, bien a través de planos de la propia instalación en cualquiera de los centros distribución al tratarse de sistemas multiplataforma.
Seguimiento de activos sobre un eje libre
En muchas ocasiones es necesario controlar otros activos (toros mecánicos, pallets, operarios, etc.) que se encuentran en movimiento continuamente y que forman parte del proceso productivo.
A través de la tecnología, los sistemas de videovigilancia de última generación son capaces de seguir y localizar miles de activos móviles de forma simultánea con una gran precisión. De esta forma la supervisión de estos activos en movimiento incluido el trabajo de los operarios se convierte en una tarea sencilla.
Los sistemas de vídeo actuales permiten localizar y visualizar estos dispositivos móviles en tiempo real y recibir avisos automáticos en caso de que invadan un área restringida o de peligro.
Por otra parte, gracias al Big Data, podemos obtener estadísticas e información de cada activo para medir su productividad, su nivel de actividad y velocidad, e incluso conocer distancias, zonas recorridas e incluso el tiempo medio de permanecía por área.
Todos estos avances suponen una gran revolución en la supervisión de personal, optimización de procesos y en maximizar la rentabilidad de empresarial gracias a la mejora de procedimientos.
Omnicalidad y gestión de stocks
La optimización y el control de stocks en el entorno omnicanal es un desafío al que cualquier cadena de suministro se enfrenta a diario. La incorporación de algoritmos de deeplearning permite monitorizar y gestionar estanterías y otros puntos de venta de forma automatizada a través del reconocimiento de objetos por sistemas de vídeo.
Automatizar los procesos de reposición y compras para definir el lote, el punto de pedido y el stock de seguridad adecuado en cada momento, es ya una realidad que algunas cadenas internacionales están llevando a cabo para optimizar el stock de sus puntos de ventas.
Sistemas embarcados en vehículos de transporte
Detectar y prevenir en tiempo real los actos delictivos realizados por Bandas Organizadas a través de distintos métodos (“Loneros”, “Surferos”, “Caballo de Troya”, etc.) e incluso en ocasiones por los propios conductores tentados de sustraer las mercancías que transportan, son algunos de los retos a superar.
Los sistemas de vídeo embarcados permiten visualizar en tiempo real y grabar las imágenes provenientes de cualquier vehículo y permiten la descarga automática del vídeo sobre un almacenamiento centralizado vía 3G/4G/Si-Fi con seguridad de transmisión de datos garantizada.
Conocer la posición GPS en tiempo real de los vehículos, el histórico de las rutas realizadas e incluso avisar en tiempo real mediante alarmas en caso de que el vehículo se desvíe de la ruta, salga de su área de influencia o exceda los límites de velocidad es posible.
Una vez más, la incorporación de algoritmos de deeplearning permite que los sistemas de videovigilancia embarcados no sólo sean una herramienta que garantice la seguridad de la flota de vehículos y de la mercancía transportada. El vídeo ofrece información valiosa sobre el estado de los vehículos en todo momento. Conocer los kilómetros realizados por cada vehículo, el tiempo empleado para realizar una ruta determinada o incluso el consumo de datos 3G/4G son algunas de los datos que las herramientas de gestión de vídeo proporcionan para la toma de decisiones en tiempo real.
Sistemas de vídeo IP, una inversión empresarial
Nos encontramos ante la IV Revolución Industrial. Ofrecer una solución completa e integral de videovigilancia se ha convertido en una “commodity” que todos los fabricantes deberíamos resolver.
Sin embargo, en la IV Revolución Industrial, los sistemas de videovigilancia jugarán un papel fundamental para la resolución de problemáticas que no están ligadas a la seguridad: trazabilidad de mercancías, supervisión de flotas de vehículos y otros activos móviles, optimización del stock, etc.
A través del Big Data, seremos capaces de recoger información asociada a cualquier imagen para sintetizarla y disminuir los tiempos de administración, agilizar la operativa diaria y optimizar cualquier proceso empresarial.
Sólo aquellas empresas a la vanguardia de la tecnología serán capaces de afrontar y superar esta nueva etapa con éxito.